La pandemia por COVID-19 ha generado gran presión en los sistemas de salud y y su personal, pues desde su aparición ha sido necesario atender a un gran numero de personas afectadas por esta enfermedad. En éste contexto y tras casi un año de pandemia, el personal de salud tiene grandes retos que enfrentar para poder continuar haciendo frente a la crisis sanitaria. Los desafíos a los que se enfrentan, sumados al cansancio acumulado, incrementan sus niveles de estrés poniendo en riesgo su salud física y mental, por ello en este artículo comparto algunas recomendaciones de autocuidado, enfocadas en el personal de salud, para que puedan sobrellevar de mejor manera su trabajo y disminuir su estrés.

Infografía: Consejos de autocuidado para el personal sanitario en tiempos de COVID-19

Infografía: Consejos de autocuidado para el personal sanitario en tiempos de COVID-19

Principales retos a los que se enfrenta el personal de salud, durante la pandemia por COVID-19 

  • Miedo a enfermar y morir.
  • Aumento en la demanda de atención médica.
  • Trabajo bajo presión. 
  • Disminución del personal de salud debido a problemas físicos y emocionales. 
  • Estrés, temor y preocupación al enterarse que un colega, amigo o familiar se encuentra enfermo. 
  • Riesgo de contraer COVID-19 y trasmitirla a familiares.
  • Uso de Equipos de Protección Personal (EPP) incomodos, que limitan la comunicación y movilidad, o la atención de necesidades básicas como hidratarse, comer o ir al baño. 
  • Estrés en la zonas de atención directa a pacientes y familias, el cual les puede generar: miedo, pena, frustración, agotamiento, etc. 
  • Exposición al dolor por la pérdida de pacientes y al sufrimiento de las familias que no pueden acompañar o despedir a sus seres queridos.
  • Duelos por la pérdida de familiares, amigos y/o colegas
  • Falta de disponibilidad de recursos terapéuticos como: medicamentos, equipo y personal, dentro de los centros de trabajo.
  • Toma de decisiones complejas y en breve tiempo, las cuales pueden generarles, en algunas ocasiones, sentimientos de culpa.
  • Estigmatización, exclusión o violencia por parte de la población general.
  • Distanciamiento de familiares y amigos. 

Es normal que en estos momentos tú, al igual que muchos de tus colegas se sientan estresados y con mucha presión; justo por ello, es importante que atiendas tu salud mental, física y psicosocial. Es importante que recuerdes que para ayudar a otros debes encontrarte en las mejores condiciones.

Con la finalidad de coadyuvar en su labor diaria y hacer más llevadera esta situación, he preparado una lista de consejos o tips de autocuidado para el personal de salud.

Consejos de autocuidado para el personal de salud 

1.- Atiende tus necesidades básicas 

Entre las necesidades básicas o fisiológicas se incluyen todas aquellas que nos permiten sobrevivir, como: alimentarnos, hidratarnos, descansar, protegernos, etc. El personal sanitario suele pensar que debe encontrarse disponible para los demás, dejando de lado sus propias necesidades, por ello: 

  • Asegúrate de comer regularmente. En la medida de lo posible mantén una dieta sana y balanceada, evitando alimentos procesados.
  • Mantén una buena hidratación. Toma de manera regular agua natural y trata de evitar bebidas azucaradas. 
  • Trata de dormir lo suficiente para sentirte descansada o descansado. Se sugiere un promedio de 8 horas diarias. En caso de tener problemas para conciliar el sueño podrías realizar  ejercicios de respiración diafragmática, relajación de músculos o practicar  meditaciones cortas antes de dormir.
  • Acude a orinar tantas veces como te sea posible, particularmente antes de usar el EPP para evitar poner en riego su salud.
  • Minimiza el riesgo de contagio, manteniendo siempre el uso de cubreboca en tu área de trabajo, realizando constantemente el lavado de manos y usando alcohol en gel. 
  • No te confíes a la hora de tomar alimentos en los espacios de trabajo. Es preferible que por ahora consumas tus alimentos en distanciamiento social, sin reunirte con compañeros, ya que al retirar el cubrebocas se incrementa el riesgo de contagio. 
  • Evita el uso de alcohol, tabaco, y otras drogas. 
  • Mantén una rutina de ejercicio aeróbico, por lo menos 10 o 15 minutos diarios. También puedes realizar ejercicios de yoga.

2.- Genérate espacios de relajación y descanso

Siempre que te sea posible, aunque sea por breves momentos, realiza actividades no relacionadas con el trabajo, que te reconforten y te permitan un descanso. No importa que sea un tiempo breve, por insignificante que parezca, esto te ayudará a tener una mejor atención para los pacientes y te ayudará a mantenerte relajado. 

Dentro de la jornada laboral puedes realizar pausas activas y conscientes, para realizar ejercicios de estiramiento y respiración. Si es posible, intenta promover dinámicas grupales, sencillas y veloces, para que tú y tus compañeros se relajen. Además, tómate un tiempo para cubrir tus necesidades básicas y evita realizar horas extra en el trabajo.

Fuera del espacio laboral, procura brindarte un tiempo para ti; realiza actividades o pasatiempos que te reconforten como: tomar un baño caliente, bailar, leer, pintar, escuchar música, jugar, ver películas, etc. También puedes iniciar un diario de gratitud en el que plasmes todo lo que agradeces de tu día. Esto te permitirá hacerte consciente de todos los recursos con los que cuentas. La gratitud es un sentimiento muy poderoso que ayuda a mantenernos tranquilos, alegres, positivos y optimistas. 

Por otra parte, en tu tiempo libre procura conversar sobre temas distintos a la pandemia, si es necesario pide a tus familiares que eviten hacerte preguntas o comentarios en ese sentido. Es importante que des un descanso a tu mente. 

3.-Mantente en contacto con seres queridos 

La familia y los amigos son parte importante de nuestra vida, nos brindan seguridad, afecto y apoyo, por ello es necesario mantenernos en comunicación con ellos, guardando siempre las medidas necesarias. 

Con la personas que compartes tu domicilio, promueve espacios de recreación con juegos de mesa, películas, caminatas al aire libre (en espacios seguros), etc. Preparen juntos los alimentos y si les es posible siéntense a compartirlos y cooperen en las labores domésticas, en la medida de lo posible. 

Además de momentos de esparcimiento es importante tener espacios de comunicación asertiva y escucha activa para que cada uno pueda hablar de sus inquietudes o simplemente compartir su día. Solo recuerda que, tan importante como mantener una buena convivencia, es pedir y respetar el tiempo personal.

Con la familia y amigos puedes mantener comunicación a través de medios electrónicos, como: videollamadas, chat, llamadas telefónicas, etc. Si hay algún evento que celebrar puedes hacerte presente enviando algún obsequio o llamando, lo que puedas realizar en la medida de su posibilidades. 

4.- Genera redes de apoyo entre colegas 

  • Mantén conversaciones constructivas y evita generar juicios de valor sobre los comentarios de otros. Observa, sin juzgar, las limitaciones o deficiencias y propón los cambios que pienses necesarios, considerando a los involucrados e intentando ser realista.  
  • Promueve elogios motivadores, cuando los consideres prudentes, pues reducen el estrés y refuerzan positivamente a las personas. 
  • Observa y escucha, respetando diferencias de opiniones o gustos. 
  • Si te es posible, genera grupos de colaboración que te permitan mantenerte actualizado, compartiendo información científica relevante sobre avances en tratamientos contra la enfermedad o su evolución. 
  • Puedes generar grupos de ayuda para conversar, en espacios seguros e imparciales, sobre tus preocupaciones, angustias y emociones. Los grupos de autoayuda funcionan de manera voluntaria y confidencial; para realizar uno, establece horarios y lugar de reunión (podría funcionar por medios electrónicos). Cada sesión la dirige un miembro diferente. La idea es generar una comunidad de que cuide de todos sus miembros, los cuales, en caso de detectar algún riesgo para uno de los integrantes, buscarán la ayuda pertinente. 

5.- Limita tu exposición a medios de comunicación

Mantenerse en comunicación es tan importante como establecer límites al tiempo que estamos expuestos a las noticias y redes sociales. Recuerda que las imágenes y mensajes preocupantes aumentan el estrés y reducen tu bienestar, por ello establece límites para el uso de redes sociales y respétalos. Determina un horario para dormir y pon tu celular en modo avión o no molestar. Evita usar dispositivos electrónicos por lo menos una hora antes de ir a dormir.

6.- Reconoce que no estás obligado a lo imposible

Tu labor, como personal de salud, es brindar la mejor atención posible a cada uno de los pacientes, con los insumos, equipo y material a tu alcance, pero sin colocarte en un riesgo innecesario.

7.- Recuerda la finitud de la vida

Debes concientizar el hecho de que en algún momento, aún brindando todos los cuidados posibles, el paciente puede dejar de responder y encaminarse a un desenlace no deseado. Si llega ese momento será importante brindarle soporte para evitarle sufrimiento. Cuando un paciente fallece es importante que te otorgues, en la medida de lo posible, algunos minutos para respirar y asimilar lo sucedido y reconocer la sensación que te provoca el evento. Si tienes creencias religiosas y tienes la necesidad o el deseo, puedes hacer una breve oración para esa persona, recordando que cada vida que se pierde deja un vacío en una familia y en la sociedad. 

Si debes notificar el fallecimiento a la familia, primero toma un momento para asimilar lo sucedido y para realizar algunas respiraciones lentas. Revisa la información del paciente y practica lo que vas a decir. Si es posible realiza la llamada en un sitio en el que no tengas interrupciones y asegúrate de que la persona a quien se notificará el deceso se encuentra en posibilidad de recibir dicha noticia, estando de preferencia acompañada. Habla pausadamente y asegúrate de que han comprendido toda la información. 

8.- Mantente atenta o atento de tus emociones y sensaciones físicas

Es normal que por momentos presentes sensaciones desagradables, reconócelas y no luches con ellas, son reacciones normales de defensa ante situaciones desafiantes. Puedes tener varias de estas manifestaciones.  

  • Manifestaciones emocionales: ansiedad impotencia, frustración, miedo, culpa, irritabilidad, tristeza, anestesia emocional, entre otras. 
  • Manifestaciones conductuales: hiperactividad, aislamiento, evasión de personas, llanto, lenguaje acelerado, dificultad para desconectarse del trabajo o descansar, entre otras. 
  • Manifestaciones cognitivas: confusión, pensamientos contradictorios, dificultad para concentrarse, pensamientos obsesivos, dudas, dificultad para tomar de decisiones, negación, entre otras. 
  • Manifestaciones físicas : dificultad respiratoria, presión en el pecho, hiperventilación, cefalea, temblores, mareos, contractura muscular, agotamiento, molestias gastrointestinales, alteraciones del apetito, entre otras.

Vigílate y observa tus emociones y sensaciones, si hay presencia permanente o constante de alguna o varias de ellas procura pedir ayuda. Existen diversas instituciones públicas y privadas que pueden brindarle atención, algunas de ellas son: 

  • Línea de la vida. Teléfono 800 911 2000  Facebook: @LaLineaDeLaVidamx
  • Línea del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz para el personal de salud. Teléfono 800 9531 705
  • Línea UNAM Atención psicológica. Teléfono 555 025 0855
  • Línea del Hospital Psiquiátrico Fray Bernardino Álcarez. Teléfono 555 487 4271

9.- Practica estrategias de regulación emocional

Existen diferentes técnicas que pueden ser útiles como por ejemplo: 

  • Ejercicio físico como caminar, correr, hacer yoga o estiramientos, etc.
  • Respiración diafragmática.
  • Respiración progresiva de Jacobson.
  • Ejercicios de atención plena o mindfulness.
  • Meditación.

Te comparto un par de videos guiados con técnicas de relajación que te pueden ayudar.

 10.- Siéntete orgullosa u orgulloso de tu labor

Con tu trabajo estás realizando una importante labor para todo el país. Solícita el material requerido y las capacitaciones que consideres necesarias a tu centro de trabajo, sin pena, ni culpa. 

11. Si lo necesitas, busca ayuda psicológica profesional

No tienes por qué contener todas tus emociones. A veces es difícil conversar con familiares o amigos sobre tus emociones o preocupaciones, ya sea porque no comprenden bien la intensidad de la labor que realizas o porque no quieres preocuparlos, considerando que ya es agobiante para ellos, saber que tienes un alto riesgo de trabajo. Platicar con colegas puede ser muy benéfico; sin embargo, todos tienen una sobrecarga de trabajo y estrés emocional que puede impedir un apoyo adecuado ante una crisis. Sin embargo, siempre existe la opción de acudir a terapia. Hoy en día la tecnología te permite tomar sesiones a distancia y de ese modo evitar realizar traslados, con lo que ahorrarás tiempo y evitarás un mayor desgaste.

Si te sientes sobrepasado por tus emociones, el estrés o con burnout, acércate a nosotros. Tu primera sesión en línea es gratis. Solicítala aquí.

Recuerda que la pandemia también pasará. No pierdas la esperanza.

Bibliografía

Guía Técnica. Cuidado de la Salud Mental del Personal de Salud en el Contexto del COVID-19. (2020). Ministerio de Salud, Perú. Recuperado de: http://bvs.minsa.gob.pe/local/MINSA/5000.pdf 

Instituto Nacional de Ciencias Médicas y  Nutrición Salvador Zubirán. (2020). Consejos para cuidar tu salud en esta contingencia. Recuperado de: http://www.incmnsz.mx/2020/BrigadaSaludMental/consejos-para-cuidar-tu-salud-en-esta-contingencia.pdf

Recomendaciones y estrategias generales para la protección y la atención a la salud mental del personal sanitario que opera en los centros COVID y otras instalaciones que presten atención a los casos sospechosos o confirmados. (2020) Secretaria de Salud. Gobierno de México. 

Recuperado de: https://coronavirus.gob.mx/wp-content/uploads/2020/05/Recomendaciones_estrategias_generales_proteccion_atencion_salud_mental_personal_sanitaro_2.pdf

Salud Mental [Sitio Web] Gobierno de México. https://coronavirus.gob.mx/salud-mental/

Sociedad Española de Psiquiatría. (2020). Cuidando la Salud Mental del Personal Sanitario. Recuperado de: http://www.sepsiq.org/file/InformacionSM/SEP%20COVID19-Salud%20Mental%20personal%20sanitario.pdf

Organización Panamericana de Salud (OPS). Cuidando la salud mental del personal sanitario durante la pandemia de COVID-19. Recuperado de: https://www.paho.org/per/index.php?option=com_content&view=article&id=4546:cuidado-y-autocuidado-de-la-salud-mental-en-tiempos-de-covid-19&Itemid=1062